El tema a abordar no es fácil. Uno no puede tomar una postura clara y simplede defender; las campanas suenan distintas, pero en algunos casos se parecen. Yentendemos que la cuestión no es defender o defenestrar las nuevas tecnologías, sinocomprender el fenómeno. En las distintas entrevistas leídas, pudimos encontrar muchos puntos de encuentro en lasopiniones, así como discrepancia; lo que nos sirve para seguir armando nuestra propiaopinión. La idea más fuerte es que las nuevas tecnologías son herramientas, que por sí mismasno son más que herramientas. Lo interesante es que estas herramientas sean bienutilizadas. Es indiscutible que tanto la televisión como las nuevas tecnologías no puedenquedarse en la vereda de la escuela; somos permeables a ellas. Litwin expone que elproblema no es la herramienta, sino la herramienta en relación al contenido y con elproyecto a trabajar que es lo que le dará sentido; las nuevas tecnologías deberían formarparte desde el uso cotidiano del docente, para así acercarla a los alumnos compartiendoun código que ambos entiendan. Tedesco también concuerda con que el uso de las TIC en la escuela es importante,ya que entiende que quien no tiene acceso a ellas está siendo excluido, quien nopuede sumergirse en los nuevos canales de información queda fuera de muchas cosas;pero, si bien las TIC deben ser tomadas en cuenta, afirma que “todos deben dominarel uso de las TIC, pero no todo puede ni debe ser enseñado a través de las TIC.”. Entonces entramos nuevamente al terreno de ¿hasta donde dejamos llegar a las nuevastecnologías? Dotro, Ipiña y Cascajosa comparten que la televisión tiene más llegada que un libro,por ende hay que utilizarla de disparadora de determinados contenidos. Dotro planteaque la TV y la escuela no comparten el objetivo, ya que la escuela debe educar y latele entretener, pero que entendiendo la TV como un canal hacia los niños, por el cualse informan y entretienen, no podemos desestimarla ni despreciarla. Ipiña entiende lomismo, el medio audiovisual es un importantísimo divulgador, pero no debe ser tomadocomo primera y única fuente de información, sino como enganche, como generador deinterés para que la gente después recurra a otros medios para profundizar los saberes. Que la escuela va perdiendo posiciones y deja demasiados baches, es una opinióncomún. Las nuevas tecnologías y la escuela deberían articular determinadas cosas,pero siempre volvemos a lo mismo… ¿cómo?, ¿es conveniente que pierda espaciolo “tradicional” de la educación? Y, obviamente, nosotras tenemos nuestra propia “versión”. Después de leer estasentrevistas, de analizarlas y analizar lo que nos rodea, creemos que no podemos hacera la escuela un fortín impenetrable para que la tele, internet y demás tecnologías novengan “corromperla”. Es necesario que se comience desde la raíz, que el docentemismo sepa qué hacer con las TIC en el aula, sino no tiene sentido, no se puedeformar un conocimiento a medias; la formación debería llegarle antes a los docentes,concordando con Sarlo cuando expone que las nuevas tecnologías no van a solucionarlos problemas que tiene la educación argentina, pero si cambiaría un poco el panoramasi los docente fueran formados con acceso a internet. Pero también creemos necesario rescatar la biblioteca, el gusto por la lectura, lanecesidad de leer, LEER… vemos que las búsquedas en Internet, por ejemplo, sonfugaces; no se lee lo que dice, ya que se usa el famoso “cortar y pegar”. No podemosestar ajenas a la fascinante fuente que es, pero hay que educar en su buen uso, enla confiabilidad de determinados sitios, en el criterio de selección de contenidos…debemos empezar por los docentes, en su instrucción sobre las TIC y su uso práctico y útil (sobre todo útil, no porque haya computadoras de regalo tenemos que hacercualquier cosa con ellas) para abordar determinados saberes. Mientras tanto… revindiquemos un poco los libros, los diarios palpables, las experiencias que pueden transmitirnos los ancianos de manera oral. Comprendamos quelas TIC son útiles, pero sólo si se usan criteriosamente… o al menos es lo que pudimosconcluir nosotras. Entrevistas utilizadas: Cine y televisión Valeria Dotro; Leandro Ipiña; Concepción Cascajosa. Nuevas tecnologías Juan Carlos Tedesco; Edith Litwin; Beatriz Sarlo. Cultura audiovisual Julio Cabrera; José Manuel Pérez Tornero; Inés Dussel.